Entre los hilos de la fe y el secuestro
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Investigadores de la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal encontraron coincidencias fundamentales entre La Casita de Cancún y el albergue de donde se extraviaron siete niños en la Ciudad de México, informó el subprocurador, Luis Raymundo Canché Aquino.
Investigación: Manuel González
La Verdad de Quintana Roo.
El subprocurador de Procedimientos Penales de la fiscalía capitalina, Javier Cerón Martínez, investiga en Quintana Roo a la agrupación religiosa Iglesia cristiana restaurada, conocida como Los Perfectos, que maneja refugios para niños desprotegidos en un presunto tráfico internacional de infantes.
Testigos y actoras del caso La casita de Cancún en 2004, Mónica Araceli Sánchez Moreno, Ágata Abigaíl Blanco Vargas y Eudoxia Eleazara Cabrera Torres aseguraron tener pruebas de que ese culto opera las Casitas del Sur en el Distrito Federal.
El grupo es dirigido por Jorge Erdely, una especie de patriarca fundamentalista, que dicta órdenes terminantes y se hace obedecer ciegamente por los miembros de la secta.
Mónica Sánchez Moreno, quien militó con "Los Perfectos", aseguró que los casos de niños desaparecidos podrían sumar miles. Según consta en expedientes, los niños son entregados a extranjeros en falsas adopciones, mediante el pago de óbolos de cinco hasta 50 mil dólares.
Las investigaciones señalan a Vanesa Barroso, encargada del albergue de donde desaparecieron Ilse, Brian, Iván, Jorge y los hermanos Natanael, Jefziba y Azael, como una fanática de "Los Perfectos".
No cumplen con la ley del hombre
En Cancún la historia se remonta a 2004, cuando La Casita fue denunciada por la desaparición de la niña Ámbar Abigaíl, raptada por Alberto Bretón Seoane, hijo de Patricia Seoane Castellanos, directora de esa casa hogar.
El 7 de junio de 2005, el gobierno de Quintana Roo pidió a la Segob investigar a la Iglesia cristiana restaurada por el escándalo de La Casita, así como a su dirigente Sergio Canavati Ayub, fundador de Caifac.
En el Distrito Federal, la Secretaría de Gobernación multará a la Iglesia cristiana restaurada pues su titular, Antonio Domingo Paniagua, no se presentó a comparecer para explicar sus vínculos en el caso del albergue Casitas del Sur.
El representante de dicha asociación religiosa fue citado en Gobernación, pero nunca se presentó; no obstante, Domingo Paniagua envió un fax a la dependencia alegando que se encuentra fuera del país, en Madrid, España.
Organizaciones no gubernamentales han referido que tras la operación en dichos albergues se encuentra una asociación religiosa y que incluso, una de las administradores fue Leydi Yolanda Campos Vera, ex servidora pública vinculada al caso Succar Kuri.
La mano de Reintegración Social A.C
El diputado local Agustín Castilla Marroquín reveló que la Interpol envió una alerta mundial para la búsqueda de la niña Ilse Michel, presuntamente desaparecida del albergue Casitas del Sur.
Señaló que versiones extraoficiales señalan que la organización Reintegración Social A.C. a la cual pertenece la casa hogar Casitas del Sur, tiene presencia en Kenia, en África, y en Canadá y en el interior del país, podría tener albergues en Quintana Roo, San Luis Potosí, Morelos y Nuevo León.
Por otro lado, Castilla Marroquín recriminó a la PGJDF que no actúe y sólo emita declaraciones en torno a ese caso.
Respecto al exhorto que hizo el procurador capitalino, Miguel Ángel Mancera, a Reintegración Social A.C., para que regresen a los menores desaparecidos, se dijo sorprendido porque aseguró que su función es ?hacer cumplir la ley, no rogar su cumplimiento?.
Lo que dice Reintegración Social
La asociación civil Reintegración Social, operadora de los albergues Casitas del Sur, sostiene que la menor Ilse Michel, de 10 años de edad, quien se encontraba en uno de sus centros, se escapó.
En un documento publicado en uno de los sitios en internet (http://www.juconi.org.mx/reintegracionsocial.htm), que esa organización ha habilitado, se señaló que Ilse Michel habría huido tras un primer cateo de la Policía Judicial realizado a sus instalaciones el 7 de noviembre del año pasado.
"Aunque la asociación tiene la tutela temporal de la menor de acuerdo con la ley vigente del Distrito Federal, como ya se informó, lamentablemente se escapó cuando llegaron los judiciales porque le dio pánico que la forzaran a regresar con los que la violan", apuntó Reintegración Social.
El 29 de enero pasado, atendiendo la orden de cateo obsequiada por un juez en Materia Penal tras las denuncias por retención de menores, agentes judiciales intervinieron nuevamente las mencionadas casas hogares y aseguraron a más de un centenar de menores.
No obstante, tras una serie de pruebas de ADN, se comprobó que Ilse Michel, que desde agosto del año pasado debía ser entregada a su abuela por orden judicial, no se encontraba entre los menores tomados bajo custodia.
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