Fomentan "cochineros" urbanos

NOTICIAS DE CANCÚN
MARCOS RIVERA

Ubicado en una de las avenidas principales de Benito Juárez se encuentra este establecimiento que hace dos años operaba como restaurante, tras el paso del huracán Wilma se ha convertido en guarida de pandilleros y vagabundos que utilizan el devastado terreno como dormitorio y el sitio perfecto para consumir drogas y alcohol aprovechándose de la falta de energía eléctrica que padece lo que quedó de terreno.
Myriam Guillermo Padilla, originaria del estado de Zacatecas habita en una de las casas colindantes al terreno arruinado por la catástrofe natural, y afirma que desde hace dos años al sitio le han dado muy mal uso personas ajenas a éste y señala que los dueños que rentaban a las personas que operaban el establecimiento como fonda, desaparecieron de la ciudad ya que han tratado de localizarlos para que de alguna manera pongan solución a la problemática con la que tienen que lidiar todos los días los habitantes de la zona.
A las autoridades se ha acudido para que vigilen y alumbren el terreno que se ha convertido en un peligro para los que transitan por la calle donde se encuentra el que fuese uno de los restaurantes más visitados de la zona, dijo la testigo que indignada pide ayuda a Seguridad Pública y hace un llamado a los propietarios del sitio para que presten la atención debida al incomodo conflicto.
Basura y todo tipo de desperdicios comenta Myriam depositan los mismos vecinos que se dicen afectados lo que ha provocado que los vagabundos estén plantados las 24 horas del día en el lote en espera de alimentos y objetos inservibles.