Delegación PGR: Oficina Vacacional

Romamy Miranda Gutiérrez

PULSO DEL CARIBE



EN MÉXICO MUEREN AL DÍA 40 personas en hechos violentos, muchos por el crimen organizado; los más, por violencia doméstica, robos y otros delitos comunes. Esa violencia detona el círculo vicioso de la ciudadanía que ante la impunidad opta por la defensa propia. Los responsables de la seguridad pública en todos los niveles han sido incapaces hasta de ejercer control en los penales de "alta" o baja seguridad, por más medidas que anuncian pero que no se cumplen y donde hay introducción de drogas y armas, asesinatos y fugas de internos.

Las cosas no sólo siguen igual, sino que han empeorado y lo que muchos mexicanos se preguntan es a dónde han ido a parar esos varios miles de millones de pesos que supuestamente se han destinado para combatir al crimen organizado que sigue haciendo de las suyas, asesinando, secuestrando y atemorizando a todos los sectores de una sociedad que, impasible, ve cómo el país sigue envuelto en la violencia y en la impotencia de sus gobernantes.

Antes se les llamaban delegados del XV Circuito, pero a partir del nombramiento de Ignacio Morales Lechuga como titular de la Procuraduría General de la República  en mayo de 1991, se suprimió lo del XV Circuito y se le quedó simplemente "Delegado de la PGR".  “Hay tanto narcomenudeo en Cancún porque es un sitio turístico”. Estas fueron las últimas palabras memorables de Imelda Calvillo, la ex delegada de la Procuraduría General de la República en Quintana Roo.

La sustituyo  Pedro Ramírez Violante,  quien  tomó posesión el 14 de octubre del 2005, estuvo al frente de la dependencia un año ocho meses.   Su administración inició con el pie derecho, ya que a 15 días de tomar posesión como delegado, se ejecutaron varias órdenes de aprehensión en contra de "narcomenudistas" de la localidad, entre ellos, la zarina del narco, Zulma Dianey Rodríguez Valle, capturada en noviembre de aquél año y trasladada al Cereso de Mérida por sus aparentes nexos con el crimen organizado.

Sin embargo, luego de eso, su actuación dejó mucho que desear y sobre las investigaciones que inició la PGR por diversos casos, entre ellos las narcoejecuciones del 2006.  Las ejecuciones del jefe del Estado Mayor de la Policía Municipal, Wilfrido Flores Saucedo, la del subdelegado de Procedimientos penales "A", de la PGR, Sam Rodríguez Rodríguez, del atentado con granadas de fragmentación contra el rotativo Por Esto y de las "narcoejecuciones" de lo que va del 2007, 18 en total, en ninguno de los casos ha habido resultados certeros.  

Ramírez Violante con antecedentes no muy bien claros,  se destacó por dejar pasar el tráfico de indocumentados, la proliferación de narcotienditas, las ejecuciones de policías y narcodistribuidores, con el argumento de que era competencia de la Subprocuraduría de Investigación en Delincuencia Organizada (SIEDO).  Por esta delegación  ha pasado una veintena de delegados y sus nombres han quedado en el olvido. No por la falta de memoria, ni porque la mayoría son fuereños y en consecuencia desconocidos para los residentes de esta región, sino porque su actuación fue tan descolorida que no llegó ni a gris.

Las facultades que les otorga el Estado para su buen desempeño son amplias y conocidas, sobre todo para una región como en Cancún, que por su situación geográfica es paso obligado para el trasiego de narcóticos, tráfico de personas sin documentos para internarlos a Estados Unidos y robo de vehículos en el extranjero. Estos delitos del orden federal son los que más afectan a este polo turístico, y  son los que menos se combaten.

Los hechos así lo demuestran y las estadísticas no mienten.  El actual  delegado de la PGR para Quintana Roo: Nicolás Hernández Mendoza,  como todos sus antecesores, el flamante funcionario llegó con el mismo discurso: Redoblar esfuerzos de la institución y continuar con el plan de trabajo del que se va. En su presentación se siguió al pie de la letra, con el mismo ritual como si se tratara de un manual de procedimientos. Lo mismo de siempre.   

Desde hace tiempo, Quintana Roo  requiere de resultados reales al  combate de los delitos que le competen única y exclusivamente a la Federación, de mantenerse como hasta ahora, la dependencia seguirá siendo una simple oficina vacacional para quienes llegan de fuera como representantes de la institución, y un escaparate de relaciones públicas para el Procurador General de la República cada vez que visite la ciudad…. ¡Upsss!.....  

¿Que están  acéfalas  la direcciones  de Comunicación Social de la PGR,  tanto en Cancún como en la Ciudad de México?....¡Noooooo!.....Si hay personal,  en Cancún esta Lina Castillo, y en la Ciudad de México esta  Miguelina González  Pérez, subdirectora adjunta de prensa, y la jefa de ellas  Sara Salas Franca…¡Zas!.....Disculpen, no sabia

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