Tiempo de Negocios
Darío Celis
En efecto, Gigante y Office Depot Inc. continúan analizando la mejor operación que más valor aporte a las 169 tiendas que existen en el país y que al cierre de 2008 deberán llegar a casi 180 puntos de venta.
La decisión de replantear la transacción, en la que Ángel Losada y compañía ofrecieron comprar en 430 millones de dólares la participación de 50% que posee su socio estadounidense, obedeció a la circunstancia de éste.
Y es que ya le decíamos hace un par de semanas que tras reportar sus estados financieros al tercer trimestre, Steve Odland, el CEO de Office Depot Inc., tuvo que revelar a analistas financieros la presión de que es objeto la compañía.
La cadena de artículos para oficina perdió en Estados Unidos valor en los últimos 12 meses. Nada más para que lo considere: su acción el 7 de noviembre de 2007 andaba en 17.5 dólares y el viernes pasado cerró en 2.57.
Su valor de mercado o ?market cap? se sitúa en alrededor de 720 millones de dólares, aunque en los últimos días de octubre se llegó a cotizar hasta en 480 millones, o 1.54 dólares la acción, producto de la crisis financiera mundial.
Es decir, la simple oferta de Gigante por 50% de las 169 tiendas que Office Depot Inc. posee en México le hubiera bastado para adquirir 90% de ésta. De ese nivel es la problemática de su socio, que acaba de reestructurar su deuda.
La compañía estadounidense arrastraba pasivos por cerca de mil 350 millones de dólares. El convenio le permitió mandar a largo plazo alrededor de 569 millones. La deuda sostenible se quedó en unos 781 millones.
Si la compra-venta con Gigante se hubiera consumado como se planteó originalmente, los 480 millones de dólares ofrecidos por los socios mexicanos se habrían ido a pago de impuestos y a amortización de capital.
Incluso Odland y Charlie Brown, el presidente de Operación Internacional de Office Depot Inc., aseguraron a sus analistas que 40% de los 480 millones se hubieran perdido en pago de impuestos, lo que se consideró exagerado.
El caso es que ante esas revelaciones Gigante tuvo que salir hace unas tres semanas a informar a la Bolsa Mexicana de Valores que su oferta no había sido aceptada. Sin embargo, las negociaciones siguen.
La relación con Office Depot Inc. es inmejorable, pese y a su situación, y el negocio de Office Depot México es muy positivo, la mejor prueba es que la cadena abrirá diez tiendas más de aquí a finales de año.
Ya se trabaja con Citigroup, que lleva Manuel Medina Mora, en una oferta que no le reste valor al socio extranjero y sí permita o la compra de 100% de Office Depot México, o una mayor expansión conjunta o individual a Sudamérica.
Comerci: stand still
Comercial Mexicana buscará en las dos próximas semanas llegar a un arreglo extrajudicial con las seis instituciones con las que suscribió contratos de derivados. Hablamos de Banamex-Citi de Manuel Medina Mora, JP Morgan de Eduardo Cepeda, Barclays de José Antonio González, Merrill Lynch de Alberto Ardura, Goldman Sachs de Martin Werner y Santander de Marcos Martínez. De ahí que las huestes de Carlos Gonzáles Zabalegui suspendieran toda acción judicial vía el despacho de Salvador Rocha Díaz y se le diera entrada a una fase de ?stand-still? liderada por Santamarina Steta. Será a través de Alberto Saavedra, abogado corporativo y financiero y socio del afamado bufete que fundó Agustín Santamarina. Habrá que ver si hay un giro positivo en la reestructura.
Pierde Aeroméxico
Donde ya le decíamos el panorama se ve igual de complicado es en Aeroméxico. Trascendió que la compañía que dirige Andrés Conesa también registró una pérdida importante por la contratación de coberturas petroleras. Se habla de que las suscribió en alrededor de 138 dólares el barril, cuándo éste anda en 60.77, lo que habría arrojado un impacto negativo de cuando menos 50 millones de dólares en las finanzas de la empresa que preside José Luis Barraza. Por si lo anterior no fuera suficiente, en el mercado ya se pusieron a la venta siete Embrear que tiene arrendados Connect, como acción del propietario para mitigar el riesgo asociado a la operación de la aerolínea alimentadora de Aeroméxico.
UBS, IXE e Inbursa
Bueno, y si aerolíneas en crisis hablamos, ya mordió el polvo la sexta en menos de un año. Se trata de Alma, la que dirige Pablo Peralta García, firma que sorpresivamente anunció el jueves su decisión de buscar el Concurso Mercantil. Ya aquí le informábamos el 10 de septiembre pasado de los esfuerzos de Carlos Peralta Quintero por encontrar a un comprador. Buscó a Fernando Chico Pardo, quien mediante Promecap fungió como asesor financiero, pero no se logró nada. Algunos de los principales acreedores de Alma son Inbursa de Carlos Slim, IXE de Enrique Castillo Sánchez Mejorada, UBS de Jorge Silberstein y Morgan Stanley de Felipe García Moreno, con cerca de 40 millones de dólares.
Gicsa por 100 mdd
Sobre la situación que vive Gicsa, fuentes cercanas a la compañía de Elías Cababié rechazaron que se requiera una inyección de 500 millones de dólares, versión que se maneja en el medio financiero. Cuando mucho el capital fresco necesario andaría entre 100 y 120 millones de dólares, recursos para afrontar una serie de compromisos. Por cierto que la última valuación financiera de Gicsa corrió por cuenta de Casa de Bolsa Bancomer, que preside Ignacio Deschamps, intermediaria que se encargaría de colocar 20% en bolsa. Hasta hace tres meses rondaba los mil 500 millones de dólares.
EDS alista recorte
Donde viene un ajuste importante de la plantilla laboral es en EDS de México, que encabeza Antonio Guerrero. Amén de la contracción que sufrirá el mercado de tecnologías de información por la desaceleración de los negocios, el recorte de personal obedece a la fusión en marcha con HP, que preside Carlos Guzmán. Como era de esperarse, se eliminarán puestos redundantes, los cuales serán retomados por esta última. EDS da empleo aquí a cerca de 3 mil personas.
Unilever sin fiesta
Otra que por lo pronto eliminará su fiesta de fin año como medida para proteger su vasta nómina es Unilever, que capitanea aquí Guilherme Loureiro. Propensa a echar la casa por la ventana para agasajar a sus empleados, le multinacional de productos de consumo se ahorrará este año alrededor de medio millón de dólares en el festejo. No se descarta que otras sigan su ejemplo.
GE descarta salida
Y en GE descartan la salida de Rafael Díaz-Granados por resultados financieros adversos. De hecho, se afirma que en varias unidades de negocios se cerrará el año con crecimientos de dos dígitos. México se ubica entre las cinco filiales más importantes para este conglomerado que preside Jeffrey Immelt.