Piden cita al general Urbano

BUSCA ENTERAR CASO DE ABUSO POLICIACO


Guerrerense radicado en Cancún hace 15 años, ex militar, busca enterar al nuevo Secretario de Policía el riesgo de integridad física y ruina económica que le causaron preventivos

BASILIO AREVALO CAMPOS
LA VERDAD Q.ROO


Conrado López García, militar retirado, con 35 años de edad y 15 años de residir en Cancún con su familia; acudió a esta Redacción para denunciar riesgo de su integridad física además de hacer pública su petición para acercarse al general Urbano Pérez Bañuelos, secretario municipal de Seguridad Pública en Benito Juárez "porque no me dejan acercarme a él", expresó.
Acompañado de un grueso expediente donde mantiene documentada la tragedia que hoy le mantiene en crisis familiar --aún no ha podido reabrir la pollería que era sostén de su familia antes de los hechos-- recordó fue víctima de abuso policiaco según consta en Causa Penal 230/2007 expediente 435/2007 integrada ante el Ministerio Público por la golpiza que le propinaron los preventivos Gonzalo Silva Barco, Felipe Amador Lindo y Luis A. Caamal Aguayo la tarde del 25 de diciembre de ese año.
Las lesiones que le causaron los uniformados a bordo de la patrulla 01063 quedaron asentadas además en el Expediente 015/2007 CAN-3 en la Segunda Visitaduría de Derechos Humanos; donde se señala que en la fecha del 25 de diciembre en la Región 227 manzana 96 lote 13 el agraviado convivía con dos vecinos en el lindero de su propiedad justo donde permanecía la pollería cuando los uniformados llegaron con dolo y bajo los influjos de alcohol comenzaron a insultarlos verbalmente "seguramente nos confundieron con alguien porque andaban borrachos", agrega Conrado en su relato.
Acto seguido se bajaron y cuando pretendía llevarse a uno de sus vecinos intenté detenerlos preguntando cuál era el delito a lo que me respondieron a golpes, me jalaron de los pelos y me subieron a la patrulla pateándome, dándome de puñetazos y con las escopetas en todo el cuerpo, explica.
Hoy, a dos años de los hechos y sin que los anteriores titulares de Seguridad Pública municipal atiendan la desgracia que le acontece y que mantiene en temor a su familia de cuatro niñas de 18, 14, 11 y 8 años de edad, junto a su esposa pide que se le haga justicia  pues el juez decretó reclusión penitenciaria a Gonzalo Silva Barco pero dejó en libertad a Felipe Amador Lindo y Luis A. Caamal. "He visto merodeando cerca de la casa, no tenemos a veces ni para comer y todos los vecinos saben aquí lo que pasó. Saben cómo nos acabaron, nos arruinaron porque no hemos podido abrir la pollería".
El denunciante desarrolló una hernia y ha sido sometido a molestosa cirugía del vaso "me lo destrozaron a patadas. Pido al general Urbano me atienda, conozca mi caso. Soy su hermano en la disciplina castrense y condeno el abuso de que fui objeto".
A la fecha Conrado López García mantiene empeñado su terreno para solventar el sostén de su familia, aunque una de sus hijas abandonó los estudios al carecer de recursos, al ver que tan sólo en las dos operaciones su padre ha gastado: nueve mil pesos en la cirugía y tres mil 500 pesos en medicamento... esto, sin contar los 900 pesos que pagó al municipio porque lo dejaran en libertad, sangrando más 50 pesos por un examen médico que nunca se le practicó, finalizó.